Todos pierden
Martes 23 de Octubre de 2012 00:43
www.nosolomerida.es | OPINIÓN | PENÏNSULA HISTÉRICA | Carlos Floriano (PP) subrayó que fue "un gran día para la participación". Óscar López (PSOE), lo contrario: "La baja participación es un hecho muy preocupante". Lo impepinable es que la abstención se dispara (250.000 votantes menos que en 2009) y representa ya a un tercio largo de la población, lo que supone que nadie gana por sus favores: todos pierden. El PP recupera tres escaños en Galicia (aunque pierde 135.000 votos) pero se deja otros tres en País Vasco, donde retrocede a resultados de hace veinte años. La mayoría absoluta de Núñez Feijóo sale barata: se apoya en menos de la mitad de los votantes y solo un tercio del electorado. Con estos números, parece muy aventurado hablar de "respaldo a Rajoy", como hace la Cospedal y cacarea la prensa servil, que reduce el escrutinio al aval al presidente del Gobierno frente al hundimiento de Rubalcaba. En casa hacemos otras lecturas menos partidistas. Las efemérides casuales han afectado a los resultados, pero a la inversa. En Euskadi, un año sin ETA solo sirve para certificar que se premia a los verdugos y se castiga a las víctimas: el País Vasco se siente país y vasco (el 60% de su Parlamento será soberanista), pese al espejismo del último pacto constitucionalista. En Galicia, a diez años del Prestige, se sigue aplaudiendo a los responsables de la catástrofe y a sus herederos. A Rosa Díez le dan la espalda sus vecinos, mientras el resto de España, donde su demagogia no conoce rival, la sobrevalora. La regeneración democrática de Mario Conde deberá esperar hasta mejor ocasión. La desunión de las izquierdas regala pequeñas alegrías a la población indignada, pero su ineficacia queda probada. Por cierto, ¿hemos dicho ya que el PSOE continúa impertérrito su (in)feliz travesía de la nada a la más absoluta de las miserias?