Las churras con las merinas
Domingo 25 de Enero de 2015 03:58
www.nosolomerida.es | La Voz Regionalista | Ángel Ávila | Sobre el Estatuto de Capitalidad de Mérida y la multitud de declaraciones, escritos, peticiones… que estamos leyendo y escuchando estos días se está convirtiendo en una “locura” y pérdida del objetivo principal.
Debemos entender el Estatuto de Mérida como la Ley que reconoce y llena de contenido institucional a una población de servicios a la comunidad extremeña. Mérida es la capital de todos los extremeños y por tanto el Estatuto debe entenderse como
tal.
A río revuelto ganancias de pescadores, podría explicar perfectamente las cuestiones que se están valorando y pidiendo desde diferentes “altavoces”. Y está muy bien que se pida y solicite cuanto Mérida necesita. Pero desde luego no debe ser en el Estatuto donde, muchas de esas solicitudes que son tan necesarias para la ciudad, deben aparecer ni darle cobertura.
Si el corazón de una población son sus ciudadanos y empresas, el diagnóstico clínico sería penoso. La empresa en Mérida no puede estar pasando una de los momentos más críticos de toda su historia. Lejos quedan aquellos momentos con empresas con cientos de trabajadores: Corchera, hilatura, matadero, cervezas. Por lo tanto, somos una ciudad de servicios, para funcionarios y turismo. En las empresas de servicios ya sabemos lo que ganan los trabajadores, en algunas empresas, suelen ser las más grandes, están contratados por horas. Aunque el sueldo de los funcionarios ofrece” seguridad” tampoco son para muchos festines la gran mayoría de salarios. Eso puede indicar el poder adquisitivo de la gran mayoría de los emeritenses.
Desde que el tráfico es tan complicado en el centro de la ciudad y aparcar es prácticamente imposible para los ciudadanos que vienen de fuera sin tener que pagar la zona azul o en los parquin privados, la gran mayoría de los vecinos de otras poblaciones que solían venir a los comercios y tiendas del centro han ido optando por otros de las barriadas o, peor aún, a la oferta más interesante de otras poblaciones. Si las tiendas-comercios venden poco producto, las compras a sus proveedores suelen ser más cara y por tanto suelen perder competitividad. Si la mejor fórmula para vender siempre ha sido comprar al mejor precio…Vamos, la pescadilla que se muerde la cola.
El Gobierno de Mérida es incapaz de crear o imaginar algo nuevo. La falta de originalidad de concejales, consejeros y alcalde es latente día a día. Lo único que ofrecen, la mayoría de las veces, es hacer una rueda de prensa apoyando tal o cual evento y poner a disposición la infraestructura de trabajadores durante unas horas para ayudar en la actividad. “La crisis no nos deja ayudar con dinero, ya nos gustaría. El anterior Gobierno nos dejó las arcas municipales con una gran deuda” dicen una y otra vez. Sin embargo cuando se les ofrece algo que a ellos les gusta para hacerse fotografías a otros “niveles” se gastan decenas de miles de euros sin pestañear. Ahora tenemos unos meses que veremos cambiar la estrategia mantenida durante más de tres años y medios, las elecciones sirven para ver que harán un lifting a casi todo cuanto se mira.
La sanidad y educación bien podrían ser los pulmones de cualquier ciudad. Como el ayuntamiento no tiene competencia en esas materias se les podría disculpar. Pero que no busquen soluciones a las mismas es una muestra más de la dejadez del Gobierno.
La universidad es una de las actividades que más vida suele ofrecer a cualquier ciudad. Alegría, es uno de los síntomas. Además de las actividades culturales que suelen girar a su alrededor. Sin olvidar el ocio masivo que suelen tener los universitarios cuando pueden.
Es este uno de los grandes anhelos de la ciudad. Tener una amplia gama de grados universitarios. La universidad en Mérida debería ser un referente de la ciudad, sin embargo nuestros políticos nunca han sabido gestionar este asunto y la Universidad de Extremadura en Mérida se podría decir que nunca ha sido objetivo prioritario para nuestros representantes políticos.
El tren con una estación intermodal es básico para el futuro de la ciudad. Una estación para el AVE, que tenga una parada de autobús urbano para que todos puedan dirigirse a sus diferentes destinos sin verse obligados a gastos extras. Parada de taxis, para quienes no quieran esperar unos minutos el autobús y busquen mayor confort. Pero al mismo tiempo, debería tener la estación de autobuses que salen para todos los destinos de Extremadura y resto de España. Mérida siempre ha sido cruce de caminos, carreteras, y ha tenido la estación con más pasajeros de toda Extremadura. Sin embargo nuestro alcalde quiere hacer un apeadero, no se lo podemos permitir. Si así fuera la ciudad verá como en el futuro perderá importantes cifras en el turismo, entre otras muchas cuestiones. Como el tiempo y gasto extra que tendrán que realizar los vecinos para ir a unas instalaciones a varios kilómetros del centro de la población.
El Festival de Teatro Clásico siempre ha sido el mejor pretexto para no invertir en otras actividades culturales en Mérida. Año tras año vemos como el Festival se ha convertido “es un festival de pueblo, de barrio” ( Con esta definición para qué vamos a utilizar la nuestra) nos decía Isabel Sánchez, actriz y Premio Ceres, sobre la actual programación que se está realizando desde hace unos años en la actividad cultural más prestigiosa y reconocida de toda Extremadura. Pero como decía, siempre ha sido el pretexto para no apostar por otra serie de actividades culturales en la ciudad.
Hay que reconocer que “algunos locos” han apostado por hacer actividades: Festival de Cine Inédito, productoras o compañías de teatro haciendo sus representaciones por “la taquilla”, pub o bares organizando conciertos en directo y poco más se puede destacar. Los Premios de Poesía y Novela Juan Pablo Forner son un punto y aparte que analizaremos cualquier otro día.
Sobre actividades culturales solo hay que mirar las que realizan las diputaciones de Badajoz o Cáceres en las respectivas poblaciones y la que ofrece la Junta de Extremadura en Mérida. Puede ser el referente de compromiso que tienen los políticos en las diputaciones con la localidad que las acoge y el compromiso que tienen los políticos de la Junta y Asamblea en la población que las acoge.
ESTATUTO DE CAPITALIDAD DE MÉRIDA
Como he repasado anteriormente no podemos estar satisfechos ni con el presente ni mucho menos con el futuro que nos quieren preparar y ofrece el Partido Popular para Mérida.
Tampoco debemos aprobar la propuesta de Estatuto de Capitalidad de Mérida presentada por el Partido Popular en la Asamblea de Extremadura, es un tocomocho para los emeritenses.
Pero no debemos equivocar las churras con las merinas. Por eso mismo, el Estatuto debe recoger lo que le corresponde. Ser la Capital de Extremadura, con la sede del Gobierno-Presidencia de Extremadura, Asamblea de Extremadura, Junta de Extremadura, Delegación del Gobierno en Extremadura y el resto de Jefaturas que disponen las leyes y decretos. (Ahora deberá aparecer también la Residencia Presidencial, por la decisión tomada por nuestro presidente de la Junta de Extremadura)
Este Estatuto debe disponer cómo Mérida debe ser una ciudad servicial y cómoda para cuantas personas tengan que venir por obligación a nuestra ciudad. Y no ver mermadas las arcas municipales por estas cuestiones.
El resto de necesidades, que son muchas, debe ser una lucha de todos los emeritenses para conseguirlas. Exigiendo a los representantes políticos de la ciudad que se pongan a la cabeza de la lucha de las reclamaciones de los vecinos de la ciudad.
